Los Sistemas Avanzados de Ayuda a la Conducción, más conocidos por sus siglas en inglés ADAS, tienen como misión principal mejorar la seguridad del coche. Esto no solo es una ventaja para los ocupantes del vehículo, sino también de cara al resto de usuarios de la vía. La tecnología actual permite incluso que estos sistemas tomen el control del coche en determinadas circunstancias para evitar un accidente o reducir las consecuencias. Los sistemas ADAS más destacados son la alerta de tráfico cruzado, la detección de ángulo muerto, la alerta de frenada de emergencia (en la que está incluido el frenado autónomo del vehículo), los sensores de aparcamiento, la alerta de salida o el asistente de mantenimiento de carril, entre otros muchos.
Para obtener toda la información necesaria del entorno estos sistemas funcionan a través de sensores como cámaras, radares o láser, que envían los datos a una centralita dotada de microprocesadores, o con inteligencia artificial en los vehículos de alta gama. Ante una situación de peligro, estos sistemas reaccionan en décimas de seguro, mientras que si dependiese del conductor este tiempo podrá multiplicarse. En este sentido, puedes ver como los sistemas ADAS permiten reducir el riesgo de accidente casi a la mitad y por lo que la implementación de esta tecnología en los coches contribuye a evitar muchos siniestros, y con ello también los fallecidos en carretera.
El extra de seguridad que trajo la incorporación del ABS o el control de estabilidad, sistemas obligatorios desde 2004 y 2014, es un gran ejemplo de todo esto. Los ADAS son el paso siguiente hacia una mayor seguridad al volante y que responden a la misión de reducir notablemente las víctimas en nuestras carreteras. En un principio, estos sistemas eran opcionales, pero se convirtieron en obligatorio a partir de 2014 el sistema de aviso de cinturones desabrochados o el sistema de control de presión de los neumáticos, mientras que, en 2018, fue la llegada del sistema de llamada de emergencia.
En la misión de mejorar los datos de accidentes en carretera, de cara a 2022 se establecen nuevos sistemas ADAS obligatorios para todos los coches nuevos que se homologuen y también los que se matriculen. A partir de julio veremos de serie en los turismos la frenada automática de emergencia, sistemas de mantenimiento carril o avisador de cinturón en las plazas traseras. En el caso de los camiones y autobuses, éstos incorporarán sistemas de información del ángulo muerto. Mientras que todos los vehículos contarán con asistente inteligente de velocidad, detección de marcha atrás, detector de fatiga y atención, control de presión de neumáticos o Event Data Recorder. Esto se debe también a las nuevos requisitos que se pedirán en las pruebas de choque.
